15 de septiembre de 2021

La torre de la golondrina, Andrzej Sapkowski


Efectivamente. mis queridos, con este ya hacen seis los libros que os he traído de la Saga de Geralt de Rivia de Andrzej Sapkowski.
¿No os da como penita saber que se van acabando los libros y que después de ellos está el videojuego, la serie —que tantas alegrías nos da— y ya?
A mí sí, mucha, y no me pasa sólo con los libros, sino que en cualquier cosa que yo vea que está por acabar me autorralentizo no sé si para disfrutar más de ella —si hablamos de un libro— o para torturarme.
Pero como el apego ya es por sí mismo un suplicio y hay que aprender a desprenderse de las cosas, no me enrollo más y os presento la que a mí me ha parecido una novela de transición, porque da más importancia a personajes que hasta el momento fueron una especie de secundarios de lujo aunque innegablemente tuvieran sus momentos de gloria y estuvieran bien definidos y porque quizá porque sé que ya el final está cerca la veo como el inicio del colofón.
Y es que, en este libro que constituye la entrada de hoy, Ciri vuelve a ser más protagonista que el propio Geralt, y cada vez Sapkowski la define más y la prepara para lo que se advierte será un gran final, un final que pide a gritos para que Geralt y los demás protagonistas de la saga reaparezcan bajo el manto de nuestra princesa, que, como digo, en este libro les ha tapado un poco.
También se nos van atando cabos que se abrieron con los libros anteriores, algo que clarifica y que acaso prepara al lector para lo que vendrá después, lo que yo preveo como toneladas de pañuelos de papel a mi alrededor para frenar la emoción.
Es curioso lo que diferencia a un autor de otro.
Las comparaciones son odiosas, todos lo sabemos, sobre todo si con quien nos comparan es algo mejor que nosotros, pero hace no mucho leía en twitter las diferencias que había entre George R.R. Martin, creador de la archiconocida serie de novelas de "Canción de hielo y fuego" —más conocida por Juego de Tronos así a palo seco y que, por cierto, un día tengo que traeros, porque, personalmente, me parecen interesantísimos pese al chasco de la serie y estoy deseando que salga Vientos de Invierno— y Sapkowski, y aunque a ambos los catalogaba de escritores brutales en su género, pero brutales de buenos, no de sangrientos, aunque también, la mayor diferencia estribaba en el cariño que le profesa el autor a los personajes. 
Decían que Martin los mataba a todos, y que extrañaba que hubiera personajes que se hubieran mantenido desde el principio de los libros hasta este último que ha salido, y que Sapkowski adora a sus personajes, hasta al más cutrecillo entre los secundarios y que por eso divagaba en pequeños detalles que les pertenecían.
¿Vosotros qué preferís?

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